Sergio Tosoratti, artista plástico

“Cristina representa para mí lo que para mis viejos representaban Perón y Evita”

Hijo de obreros, pintor de toda la vida, desde los seis años y artista profesional hace unos diez años aproximadamente, en sus obras trabaja los movimientos, barcos, tempestades, revoloteos de pájaros y no podía faltar el movimiento más importante que marcó su vida, el movimiento peronista.

A-¿Cómo surge esta impronta peronista en tus cuadros, en tus pinturas?

Sergio Tosoratti: Por varias vertientes diferentes, una, por el lado familiar peronista de toda la vida: a mí a los cuatro años me llevaron a ver a Perón a Gaspar Campos y viene así, ya de esa época. En mi casa siempre se habló de política y siempre se habló de peronismo, muchos cuadros los construí de relatos de mis viejos, de lo que me contaban, del 17 de Octubre y cosas así. Además hago otra obra que no gira en torno al peronismo, que son barcos y pájaros. Trabajo siempre en torno a los movimientos, digamos que no trabajo cosas estáticas en la imagen, entonces el movimiento peronista no podía quedar de lado. Y también cuando voy a una manifestación o a un lugar bien peronista siento
una energía y una necesidad terrible de ponerme a pintar ahí, algo que me surge de adentro como muy difícil de contar. Por ejemplo el otro día en la fiesta del 25 de Mayo hubiese agarrado un cuadro gigante y hubiera empezado a tirar pintura, me viene así.

-¿Qué te genera Cristina?

S.T.: Cristina me despierta una energía de hacer, una cosa muy potente. Hay varias cosas que me generan esa energía, esa necesidad de agarrar óleos y trabajar, como que explota mi interior, me agarra una desesperación en ese momento, porque mi pintura son muchos brochazos y mucha materia y cuando estoy con algo que me siento cómodo, siento como que la masa me traspasa, me da mucha potencia. Cuando veo barcos oxidados, cuando veo un revoloteo de pájaros, toda esa cosa del movimiento me produce unas vibraciones, una locura que me dan ganas de empezar a trabajar.

-¿Qué sentiste cuando estuviste mano a mano con ella?

S.T.: Yo tuve que trabajar siempre muchísimo, llegué a fabricarme los óleos porque no tenía y los cuadros los hacía con sábanas, entonces de ese momento, a estar ahí fue tremendo. Cristina representa para mí lo que para mis viejos representaban Perón y Evita, haberme encontrado con Cristina es para mí como verla a nivel prócer, como puede ser San Martín, Perón o Evita. Aparte es re coloquial y se mueve como la gente que milita en las unidades básicas, es una militante más. También, ver en una nota en la casa de Olivos donde sale una foto y de fondo se ven mis dos cuadros, para mí fue muy emocionante.

-¿Qué significó para vos la asunción de Néstor al gobierno?

S.T.: Cuando asume Néstor yo no estaba, la verdad, convencido; hasta que me termino de convencer, y me adhiero y lo empiezo a valorar a Néstor, cuando descuelga los cuadros de los milicos y el discurso que da ese día. Ahí dije, me parece que se viene una mano distinta. Pero yo venía muy desilusionado con la política, mi viejo ahora ya se jubiló, era metalúrgico, tornero, y yo también por herencia soy tornero , trabajé muchos años en el taller y los noventa fueron un desastre, realmente sobrevivimos en los noventa: era pasar de tener cinco empleados a tener solo uno y, aparte, a mí me habían criado de una manera que señal de orgullo era el logo de YPF, mi viejo nunca cargaba en otro lado. No era muy comunicativo pero era categórico, por ejemplo, íbamos caminando y te decía: -¿Te gusta ese edificio? Le decía que sí y él contestaba: -Bueno, ese lo hizo Perón. Y eso no te olvidas más; y así con todo. Mi viejo decía: -Yo renunciaba a un trabajo en la época peronista y en el mismo día conseguía otro; son esas cosas que por más que te quieran venir a contar y que te digan, no, porque Perón esto o lo otro, hay una verdadera historia que está ahí, que para mí no tiene discusión, que es laburo, la construcción de cosas. Yo entre la serie peronista tengo una obra iconográfica donde pongo las obras realizadas de
la época, como ser la Siambretta. Y en mi familia hay antiperonistas, entonces las discusiones de los domingos eran muy acaloradas pero, en un punto, también podía escuchar la otra campana, que era la típica, quemaban el parquet, usaban las bañaderas para hacer los almácigos y todas esas pelotudeces
que se dicen, que hoy en día se dicen de Cristina, que es bipolar y esa mirada de desprestigio muy gorilona. Con Néstor, cuando empezó a hacer todo lo que pedíamos, empecé a creer en la política, porque a muchos de nuestra generación nos hicieron antipolíticos. La verdad, me hubiera gustado conocerlo, era groso.

-¿Por qué pensás que está tan molesta la oposición y la prensa opositora?

S.T.: Al opositor le molesta todo, pero no le molesta que Macri ande cantando, ni que se esté inundando la ciudad y vaya a ver a Kiss. Yo pienso que si Cristina tuviese la prensa a favor sería Dios, porque, la verdad, se hicieron muchas cosas y el boom fue cuando recuperaron YPF. Fijate que en las charlas de los domingos los familiares antiperonistas, como vengo de familia de ferroviarios y Perón los había estatizado, te decían con los ingleses estábamos mejor. Pero en los noventa vivimos lo que fue la destrucción del ferrocarril para mi familia, y a mi tío, el histórico del ferrocarril, lo jubilan y no solo cierran su taller sino que lo demuelen y regalan las tierras a un colegio de curas, fue una cosa terrible, regalaron todo. Y ahora lo que hace Macri, de cerrar la línea A y no ser capaz de decir: guardemos diez formaciones para que los domingos anden los chicos. En el mundo están desesperados por conservar cosas antiguas, la antigüedad va cada día más en auge y acá en cambio no, esa mentalidad
de desguace. Los peronistas estamos tan acostumbrados a resistir que en algunos campos hay que seguir resistiendo. Cuando fui el 25 de Mayo y vi a toda esa gente feliz, fue increíble. Y lo mismo me pasó en La Plata, con los inundados: fui a darles una mano y estuve ahí con pibes y me cayó la ficha de qué es lo que los asusta tanto a los de la derecha, a la oposición: es que tenemos de acá a ocho o nueve años, cien potables dirigentes, porque ahí había pibes de diecinueve años que habían dormido dos horas y seguían y estaban convencidísimos del proyecto.

-¿Qué te genera esta juventud tan comprometida?

S.T.: Es maravilloso y es algo que no pasa en otros partidos políticos, la histórica juventud radical, que en su momento convocaban juventud, no están más porque los espantan a los pibes. Yo milito desde el arte y mi mujer milita en La Cámpora, y he ido a unidades básicas y es súper sano, gente pintando las banderas, taller de tejido y otras actividades que son muy de la comunidad y me parece maravilloso, ¡que más sano que militen!

Lic. Fernanda Teves

Fuente: http://cada17.com/notas/Sergio-Tosoratti-artista-plastico.html